No es necesario "ver" aquellas injustas o trágicas cosas de la vida con los ojos para tomar conciencia de aquellos actos. ¿Para algo esta la mente o no es así?
No es necesario ver el mal de la violencia para sentir el sufrimiento de tales víctimas, por ende no es necesario sufrir para parar con el sufrimiento.
¡Grande es la mente, infinito el espíritu!
Miremos, pero miremos las cosas lindas; la vista es un don incomparable y único.
Utilicemos la mente para darnos cuenta de lo que está de cierta forma "mal" o "bien" llegando a tal conocimiento que superamos éso y cambiamos primero para luego cambiar el mundo.

Necesito mis piesitos descalzos para sentir la textura relativa de la tierra.
Necesito mis manitos sucias para entrar en verdadero contacto con sus vibraciones.
Necesito mi pelo largo para reconocer las señales del viento.
Pero te necesito a ti para duplicar nuestra existencia.

Llegué aquel día con tan solo un objetivo.

Pasaron los días y supe que un sol existía.
Las noches siguieron a oscuras, pero tu existencia iluminaba aún.
Aun no sé como el viento volteo mi cara para descubrir tus ojos,
Esos ojos que me presentó con encanto llenando el espacio vacío que había dentro de mí pero bajo el defecto de querer tener tus besos para completar el eclipse.

Quiero esa mirada penetrante.
Esa que recorre entre mis glóbulos y llega hasta mi corazón.
Esa que cada vez que me acuesto imagino encima de mí.
Esa que extraño cuando beso tus labios y cierro mis ojos.
Aquella que una vez me contó que deseaba seguir viéndome.
Aquella que me abrigó en los momentos más helados.
Aquella que durante un corto periodo de tiempo me complementó hasta el infinito.