
Tú eres mi hombre,
Pero juntos somos uno.
Lindo, suave y encantador,
De pelo liso y fino,
fino como tu mirada de seda,
Que cuando roza por mi cuerpo,
Quedo atrapada en su textura.
La noche ya nos envuelve,
Y ahí estamos otra vez,
Desnudos inocentemente
en el encanto de nuestro placer.
Voy sintiendo,
Dulce y lentamente
Tus labios suaves hasta mi pecho.
Mi corazón late,
El tuyo me responde,
Y así…
Bajo nuestro encanto,
Vivimos mágicamente
cada minuto de excitación.
La noche se acaba…
El sol ya me saluda.
Seguimos siendo uno solo
Decorados de rizas que
alegran mi ser extraño,
un ser que ya no logro reconocer.
Tú,
Mi hombre!
Que encanto mas lindo,
Que dulzura más preciosa,
Pero más aun,
Que ganas de que vuelva a caer la noche,
Sin volver a salir el sol nunca mas,
Jamás.